El último suspiro, es una película canadiense, de la directora Léa Pool, que nos habla de las vivencias de abandono de unas adolescentes, pues o han perdido a sus madres o temen perderlas.
Y sobre todo tiene interés por que una de ellas es adoptada, y siente a su madre como fría y añora a una madre biológica idealizada. Podemos decir que tiene un apego inseguro, y eso le llevará a vivir sus relaciones afectivas de una manera, que puede llegar a ser muy dramática.
La película está muy bien, pues explora las vivencias tan importantes respecto a la relación con las madres, como las de búsqueda de seguridad y de identidad entre las iguales.
Muy buena fotografía y excelentes actuaciones.
Actualmente se puede ver en Filmin.
Es el cine desde la mirada adoptiva. Sección dirigida por J.Ignacio Díaz Carvajal, que nos propone una película o documental con temática adoptiva y además nos brinda una sinopsis y toda la información sobre el título que nos sugiere.
EL último Suspiro (Lost and Delirious) (2001)
Director: Léa Pool
Canadá
2001
103 minutos
Drama.
Sinopsis: Mouse Bradford deja la pequeña ciudad donde ha nacido y crecido para ingresar en el elegante internado femenino Perkis College. Enseguida es aceptada por sus dos compañeras de habitación, la llamativa y perspicaz Pauline, y la atractiva y simpática Tory. Las tres están unidas por haber sufrido ya en sus jóvenes vidas. Mouse ha perdido a su madre, Pauline a sus padres que la dieron en adopción y Tony sabe que está perdiendo a sus padres, y las esperanzas que ellos han depositado en su hija. Aunque para Mouse ambas son sus mejores amigas, está desconcertada por la intensidad de la relación existente entre Pauline y Tory. Este mundo se le viene abajo cuando ambas son vistas en una muy comprometida situación amorosa. (FILMAFFINITY)
Valoración cinéfila 8/10
Valoración adopción-abandono 7/10
Extraordinaria película sobre el amor apasionado y las dificultades para vivirlo debido a que se da entre dos chicas. Una película sobre la construcción de la identidad, y como influye la historia familiar.
La película nos habla de tres chicas que están unidas por compartir habitación en un internado. Las tres comparten la pérdida de sus madres: Pauline (magnífica Piper Perabo), porque fue dada en adopción, Mouse porque su madre murió hace 3 años, y siente que su padre la ha abandonado, y Tory que se siente «adicta» a su madre y cree que la podría perder del todo si se enteran en casa de su historia de amor lésbico.
Por un lado tenemos el drama de la chica adoptada, pues idealiza a su madre biológica, debido a que siente a su madre adoptiva como un ser frío, que no le quiere. Por fin ha encontrado un amor incondicional y la única persona que le ha querido en su amiga Tory.
Es indómita, se salta las normas, es un espíritu libre, dispuesto a enfrentarse a todos con su verdad, a costa de su propia autodestrucción.
Mouse está descubriendo la sexualidad, la pasión, la libertad y el ser mujer a raíz de lo que contempla y vive de la relación de sus amigas. Y empieza a salir de su cascarón infantil, del que parecía que no había salido todavía a causa del duelo por su madre.
Tory tiene que alejarse de Pauline, por miedo a la reacción de sus padres y de su ambiente, con lo que desencadena un verdadera crisis profunda psicológica en Pauline, debido a que esta se vuelve a sentir abandonada, de forma radical (como lo fue por su madre). Y esta coincide con el rechazo de su madre biológica (como ya dije, idealizada) a ponerse en contacto con ella. Cayendo en la más absoluta desesperación
Para saber más sobre José Ignacio Díaz Carvajal pincha en la imagen.
You must be logged in to post a comment.