Poderosa Afrodita, de 1995 es una típica película de Woody Allen, con ese sentido del humor bastante ácido y crítico con los personajes, y que en esta ocasión trata sobre una adopción.

Desde nuestro punto de vista, es un verdadero disparate. Pues nos muestra todo lo que no habría que hacer en relación a la búsqueda de orígenes. Y de inmiscuirse en la vida de los padres biológicos, sin informarles y sin pedirles permiso.

Es una buena película para reflexionar que los daños que se pueden producir, tanto en la vida de nuestros hijos, como en la nuestra y en la vida de los padres biológicos, son considerables, si no se hace con mediadores adecuados y teniendo en cuenta el respeto por la integridad moral, psicológica y física de los integrantes de esta «tríada de la adopción». No hay que hacerlo a las bravas, y es mejor dejarse asesorar y sobre todo no dar pasos de los que uno se pueda arrepentir, ya sin remedio.

Por lo demás una película divertida, que se puede encontrar en plataformas con mucha facilidad.

Es el cine desde la mirada adoptiva. Sección dirigida por J.Ignacio Díaz Carvajal, que  nos propone una película o documental con temática adoptiva  y además nos brinda una sinopsis y toda la información sobre el título que nos sugiere.

Poderosa Afrodita (Mighty Aphrodite ) (1995)

Director: Woody Allen
EEUU
1995
95 min
Comedia

Sinopsis: Nueva York. Una galerista (Helena Bonham Carter) convence a su marido (Woody Allen), periodista deportivo, para adoptar a un bebé. El marido, asombrado por la inteligencia del niño, quiere saber si su madre biológica es también superdotada; así que decide buscarla. Cuando consigue localizarla, resulta que se trata de una tierna prostituta, con muy pocas luces, que aspira a ser actriz (Mira Sorvino). (FILMAFFINITY)

Valoración cinéfila 8/10

Valoración adopción 9/10

Tenemos una divertida película de Woody Allen, centrada en el tema de la adopción para fijar sus neurosis, en este caso sobre nuestros orígenes y la genética de la inteligencia.

Pero nos ofrece unas situaciones disparatadas, en la medida en que se implica en buscar a la madre de su hijo adoptado, robando el expediente, engañando a las personas, y provocando situaciones que podrían volverse realmente en contra de él y de su hijo adoptado, pero le da una salida humorística, en la que consigue controlar la vida de esta chica, madre de su hijo.

En todo caso si fuera una situación real, sería muy negativo, pues tendría secretos sobre la madre de su hijo, que no podría revelar sin crear malestar y resentimiento tanto en su mujer, como en su hijo. Pues no se limita a saber sino que interviene y de maneras totalmente fuera de cualquier ética.

Y obtiene información que no debería conocer, y que sólo su hijo tiene derecho con la mayoría de edad.

Aquí volvemos a prevenir a las familias y a los hijos adoptados, que buscar los orígenes a lo bravo, sin mediadores ni cuidado, puede generar verdaderos traumas y problemas, que es mejor evitar con el debido asesoramiento y mediación.

En este caso tenemos el ejemplo de todo lo que no se debería hacer. En clave de humor.

Otro tema que pasa casi desapercibido es la manera en que obtienen el niño, que realmente se sugiere en algún momento que obtienen el niño, por presión económica a la agencia de adopción privada. Y no aparece ninguna señal de que se formen, ni de que les examinen como posibles padres adecuados, ni ningún proceso ni trámite habitual en cualquier país civilizado, respecto a la protección del menor.

Para saber más sobre José Ignacio Díaz Carvajal pincha en la imagen.