Lo dan absolutamente todo por los pequeños sin pedir nada, tan solo “una foto de vez en cuando”, pues no quieren entrometerse en la vida que la familia adoptiva y “su niño” han formado. Con discreción. A distancia. Pero felices por el trabajo hecho. Esperanzados en que todo ha de ir bien y anhelando que cuiden a ese pequeño, que lo quieran tanto como ellos.
Corrección de hábitos en nuestros hijos
Tenemos que ayudarles a modificar hábitos y conductas, aprender a alimentarse correctamente (y no compulsivamente) a tener hábitos de higiene, de orden, ayudarles en el aprendizaje de actuaciones adecuadas a reconducir sus impulsos, jugar ordenadamente, enseñarles cómo hablar y dirigirse y reaccionar ante los demás, etc.
Funciones emocionales de los padres
Son estas funciones las que hacen posible reconocer los sentimientos y los conflictos, poder nombrarlos, ponerlos en palabras, reconocer las ansiedades y aguantarlas, contenerlas para que no se desborden, y hacer uso de la capacidad de pensar, de comprender lo que pasa, para poder encontrar soluciones, nuevas vías de actuación, etc. Son los padres los que han de asumir estas funciones para que la familia pueda avanzar como tal, para que en definitiva, pueda ser verdaderamente familia.
La adopción ¿Un acto de amor o de egoísmo?
La revisión lo más honesta y profunda posible de la motivaciones que llevan a la decisión de adoptar, es un trabajo previo que ha de hacerse antes de dar el paso, es un ejercicio que no tienen que hacer los padres que lo son de forma biológica, que no han de elaborar concienzudamente las circunstancias que les hayan conducido a la adopción. Los padres que aspiramos a serlo por adopción sí, tanto si la adopción se va a afrontar solo o en pareja.
Ya está aquí mi hijo ¿Cuándo llegará el amor?
Y es que de esto poco se habla, nos preparamos para que el niño ese diminuto (o no tanto) extraño, no nos quiera desde un principio, incluso a veces nos desdeñe, nos manifieste que papá y mamá son palabras exentas del sacro significado que poseen para nosotros, pero no nos preparamos para los extraños que encontramos en nosotros mismos. Y es para lo que también hay que prepararse, nos hablan de duelos y despedidas, pero no de presentaciones, de saludos y acogimiento a nuestros propios “yo” recién descubiertos.
Ese entorno cómodo. Por Mercedes Moya
Tratan de amoldarse, quieren encajar pero distorsionan, desconciertan y confunden y se sienten confusos, hay que ayudarles a entender que algunas de sus prácticas y conductas que tan útiles les fueron en un pasado no les sirven en su nueva situación sino que lejos de servirles les causa problemas y muchas veces provoca el rechazo de su nuevo entorno que no comprende ni se hace una idea de lo que provoca esas conductas disruptivas
Presentación del cuento “¿De qué color es mi mariposa?” 17 de septiembre. Granada
El sábado 17 de septiembre a las 19:30 en Granada . Una herramienta mágica para ayudar a los niños adoptados a contar su historia escrita por María Martín Titos y Mercedes Moya Herrero. Presentación de lujo de la mano de Iratxe Serrano Presidenta de La Voz de los Adoptados, quien escribió el prólogo del cuento. Nadie mejor que ella para hablar de la adopción y de Valentina, la protagonista de la historia. Cuenta cuentos ,merienda y actividades para los niños.
Niños con necesidades especiales. Montse Vázquez
Tener un hijo con dificultades no es una posibilidad exclusiva del hecho adoptivo. Es una posibilidad real cada vez que un niño llega al mundo. Una lotería que los padres jugamos cada vez que queremos tener un hijo. Tanto por la vía adoptiva como por la biológica. Y nadie emprende un embarazo deseando tener un hijo con problemas. Claro que hay embarazos normales y embarazos de riesgo.
Adoptar y aceptar sin condiciones. Por Mercedes Moya
Las familias adoptivas hemos de enfrentarnos a situaciones emocionales específicas en función de las vivencias, de las carencias y de las características de nuestros hijos y las propias del proceso de adopción (adaptación, apego, vinculación, búsqueda de sus orígenes, etc.) Por esto tenemos que aceptar y asumir una crianza de nuestros hijos aún más complicada que la de los hijos biológicos.
Guía de trabajo de historia de vida
Un enfoque biográfico ideado para ayudar a los niños y niñas a comprender y dar sentido a sus vidas,Va encaminado a minimizar los efectos de las rupturas y pérdidas o a evitar, en la medida de lo posible, que las experiencias vividas por los niños y niñas antes y durante el acogimiento residencial y/o familiar dañen el sentido positivo de sí mismos.
Repetir curso. Sensaciones de madre. Itsaso Urdaibai.
Aunque poco a poco se ve con otros ojos el hecho de repetir curso, la mayoría continua viendo al niño que repite como un vago o como un tonto y cortito o como un niño conflictivo y raro. Y nos guste o no, más de uno así va a juzgar a nuestro hijo repetidor. Por esto, el que alguno de nuestros círculos sociales se entere de que nuestro hijo repite nos pone la piel de gallina. Dentro de esa mayoría que mira mal el hecho de repetir estamos nosotros mismos, padres… hasta que de pronto nos dicen que nuestro hijo debe de repetir curso.
El uso de las recompensas para estimular comportamientos favorables.
Se acaba el curso, y las puertas de los colegios y los centros comerciales se llenan de catálogos repletos de juguetes con los que regalar a nuestros hijos por su buen comportamiento. ¿Son buenas estas recompensas? Si bien la mejor recompensa es la atención de los adultos, hay otros tipos de premios «concretos» que a veces podemos utilizar: actividades o privilegios especiales como un paseo, un rato más de dibujitos.