En el reciente I CONGRESO INTERNACIONAL INFANCIA Y ADOLESCENCIA organizado por la facultad de Trabajo Social y Servicios Sociales de la Universidad de Granada bajo el título “Construyendo otras realidades desde claves no adultocéntricas” Se organizó una mesa para hablar sobre “La búsqueda de los orígenes de los adoptados” en la que Diana Marre expuso las realidades del presente en Adopción, nacional, internacional e incluso del acogimiento infantil.
Para ponernos en situación empezó haciendo historia:
Aunque el boom adoptivo comenzara en el año 95 tras l emisión del documental «Las habitaciones de la muerte», en España se tienen registros de adopciones internacionales desde principios de 1990, sobre todo en América latina. Entonces las adopciones eran facilitadas por redes y contactos conocidos y promovidas por monjas y misioneras en estos países y también en África. Entonces, a principios de los noventa, la adopción internacional se organiza con el modelo de adopción nacional y dentro del marco del convenio de la Haya (1993) en el cual se sugería que lo mejor para que una adopción resultara con éxito lo mejor era que los niños cortaran todo tipo de relación de los niños con sus familias de origen.
Este «corte limpio» operó en todos los países que firmaron el Convenio, con la diferenciación de Francia que mantuvo la adopción simple, que es aquella en que el niño no pierde la relación con la familia de origen aunque adquiera una filiación con la familia adoptiva, este modelo existió en nuestro país hasta el año 81.
Tras este repaso por la historia la antropóloga recalcó que Hay que dar un lugar aunque sea simbólico a la madre biológica.
Las personas necesitan información, necesitan saberlo más pronto posible y el gran error que puede cometerse es cuando el niño pregunta y los padres le contestan que ellos tienen información pero que sólo podrán acceder a ella los niños cuando cumplan los 18 años ( según la convención de los derechos humanos).
Las familias biológicas en nuestro país están estigmatizadas -explicó- las relación con la familia de origen es de silencio, de tabú, creemos que debemos proteger a los niños de toda información sobre su familia de origen…No existe la triada.
Es muy significativo que haya 23 asociaciones de personas adoptadas en España que buscan sus orígenes por lo que recomienda integrar esa parte de la persona cuanto antes para que no haya huecos ni vacíos y los niños no se lancen por su cuenta a la búsqueda en redes sociales que pueden provocar serios problemas, ya que pueden darse casos en los que los niños se encuentren con los familiares que abusaron de ellos o los maltrataron. Por lo que su recomendación es clara:
«Hay que trasmitirles a esos niños la información cuanto antes para que se la administren como crean conveniente».
Dr. Diana Marre es actualmente profesora titular del Departamento d’Antropologia Social i Cultural de la Universitat Autònoma de Barcelona. Fue investigadora Ramón y Cajal (2008-2010) e investigadora y evaluadora de diversos proyectos autonómicos, estatales, europeos e internacionales. Desde 2006 dirige como Investigadora Principal de proyectos I+D sobre infancias, familias, reproducción y procreación financiados por diversos organismos y entidades.
Sobresale su labor como directora desde el año 2006 el Grupo de Investigación AFIN(Infancias & Familias) de la Universitat Autònoma de Barcelona. También ha sido investigadora y Directora del Área de Adopciones y Circulación de Menores del Instituto de Infancia y Mundo Urbano de Barcelona (2006-2008) e integra la Red Iberoamericana de Infancia y Juventud .
Trailer del cuento realizado para integrar a la madre biológica en la vida de los niños adoptados.
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